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Usher y sus invitados entretuvieron a los fans en el Medio Tiempo del Super Bowl

AARÓN HUNGAR / Enviado Especial

LAS VEGAS, Nevada, 11 de febrero de 2024.- Usher estaba en el campo de juego, sentado en un trono, luego se subió al escenario, fueron saliendo sus invitados poco a poco, hubo música, baile y hasta patines, y así se llevó a cabo el Show de Medio Tiempo del Super Bowl LVIII.
Las luces de Allegiant Stadium se apagaron y el intérprete comenzó a cantar sus éxitos con “Caught Up”, pasando a “U Don’t Have to Call”, “Superstar” y “Love in the Club”.
Alicia Keys apareció tocando un piano enorme con cortinas rojas y se unió al espectáculo para interpretar su canción “If I Ain’t Got You”, que se transformó en “My Boo”, y Usher se quitó un guante rindiéndole tributo a Michael Jackson, quien fue el primer gran artista en aparecer al medio tiempo de un Super Bowl XXVII hace 31 años.
Usher comentó en la semana que su show sería más impactante que el de Michael Jackson, pero quedó tan corto que hubo opiniones negativas en redes sociales por haber sido aburrido, lento y sin un concepto claro, sin embargo, en el mismo estadio la gente sintió que fue un espectáculo bueno y entretenido.
“Dijeron que no lo lograría”, le dijo a la multitud, dedicando el set a su “mamá”. Durante 13 minutos durante el espectáculo de medio tiempo patrocinado por Apple Music, Usher reunió a varios invitados, entre ellos ELLA, Jermaine Dupri, Lil Jon (para “Turn Down for What”, que se convirtió en “Yeah!”, e incluyó una aparición especial de Ludacris).
El superestrella del Rhytm and Blues hizo varios cambios de vestuario y una interpretación rodante de “OMG” mientras usaba patines, en un momento, deslizándose entre las piernas de will.i.am.
“Burn” se convirtió en un punto destacado de la actuación. El intérprete de 45 años de edad ha vivido en Las Vegas los últimos 2 años, y su regular show, “Usher: My Way”, en Dolby Live at Park MGM ha estado agotado todo el tiempo.
El 8 veces ganador del premio Grammy tampoco es ajeno al Super Bowl: hizo una aparición especial con el líder de Black Eyed Peas, will.i.am, en 2011. En el Super Bowl XLV, descendió de las pantallas que están por encima del campo en AT&T Stadium para interpretar “OMG” en Arlington, Texas.

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