NEW ORLEANS SAINTS
New Orleans recibió el honor de ser la franquicia #16 de la National Football League el 1 de noviembre de 1966. Apropiadamente, justo fue el Día de los Santos.
A mitad de diciembre, John W. Mecom Jr., un hombre de 28 años de edad exitoso en los negocios de Texas y Louisiana, se convirtió en el socio mayoritario. Menos de un mes después, el 9 de enero de 1967, nadie se sorprendió cuando el equipo fue nombrado “Saints”.
El 8 de marzo, los Santos lanzaron su primera campaña de boletos para toda la temporada que produjo 20,000 ventas el primer día y 33,400 antes de que comenzara la temporada 1967 de la NFL.
Ansiosos de generar tanto entusiasmo de los aficionados como fuera posible en una ciudad que no había sido expuesta previamente al fútbol americano profesional de ninguna forma, los Saints obtuvieron en 1967 3 jugadores que terminaron tiempo después en el Salón de la Fama del Fútbol Americano Profesional.
Paul Hornung y Jim Taylor, un héroe del emparrillado del estado de Louisiana, llegaron de Green Bay, y el ala defensiva Doug Atkins llegó en un “trade” con Chicago.
Literalmente, los Santos tomaron “La Ciudad que fue olvidada de Cuidado” como tormenta. Ganaron 5 de sus 6 juegos de pretemporada y abrieron la campaña regular el 17 de septiembre de 1967 contra Los Angeles Rams ante una audiencia de 80,879 asistentes que abarrotó Tulane Stadium.
Los fans de New Orleans siempre recordarán la devolución de kickoff inicial para touchdown de 94 yardas por parte de John Gilliam, aunque los Carneros terminarían ganando el partido 27-13.
Una victoria al final sobre Washington Redskins permitió a los Santos igualar su marca del primer año de 3-11 que logró Minnesota en 1961 y Atlanta en 1966. Lo más significativo de todo, sin embargo, fue el promedio de asistencia de 75,463 aficionados por partido.
Los Saints hacían cada juego en casa un evento especial, una autonombrada “Mardi Gras in Autumn”, con porristas, bandas de jazz, rutinas de precisiones de las bandas de high school y bandas colegiales, y apariciones semanales de “The King” (El Rey), parte dueño, parte porrista y parte el mago de la trompeta Al Hirt.
New Orleans estaba destinado a fracasar año tras año en el campo de juego.
Sin embargo, se encargaron de manejar la emoción de sus aficionados con algunas victorias emocionantes y momentos memorables en Tulane Stadium y después en el Louisiana Superdome, con capacidad de 69,056 espectadores abriendo sus puertas en 1975.
No cabe duda que el récord de la NFL de Tom Dempsey con un gol de campo de 63 yardas en 1970 para darle la victoria a New Orleans 19-17 sobre los tradicionales Detroit Lions en la última jugada del encuentro.
Jugadores muy destacados como el quarterback Archie Manning, el corredor George Rogers, el miembro de Salón de la Fama, Rickey Jackson, el receptor abierto Eric Martin y el pateador de lugar Morten Andersen estaban entre los que tuvieron papeles importantes para que Saints avanzara hacia el respeto.
La era ganadora en New Orleans comenzó el 3 de junio de 1985, cuando otro hombre con negocios en Texas y en New Orleans, Tom Benson, le compró la franquicia a Mecom.
Benson contrató como presidente y gerente general de inmediato a Jim Finks, un administrador de Salón de la Fama, y a Jim Mora como su head coach. La pareja de estos dos hombres cambió a los Santos muy rápidamente en una de las franquicias más potentes de la NFL.
Aunque los Santos terminaron con marca de 8-8, tanto en 1979 como en 1983, no tuvieron un año ganador hasta 1987, su temporada número 21 de existencia. Ese año, bajo el liderazgo del Coach Mora, los Saints ganaron 12 de 15 partidos y terminaron en 2º lugar en la División Oeste de la NFC.
New Orleans calificó a playoffs en 4 ocasiones durante las siguientes 6 temporadas, de 1987 a 1992, y ganaron el campeonato divisional del Oeste NFC en 1991.
Mike Ditka, ala cerrada de Salón de la Fama y exentrenador en jefe de Chicago Bears, guió a los Santos de 1997 a 1999.
Para la temporada 2000, contrataron al exlinebacker y eterno asistente, Jim Haslett, para ser su nuevo head coach.
En 2006 ocurrieron 3 hechos que cambiarían la historia de New Orleans. Firmaron a Drew Brees como agente libre, después de que el quarterback rechazó la oferta de irse a jugar a Miami. Después de seleccionar en el NFL Draft 2006 al superestrella Reggie Bush. Finalmente, se dio la contratación de Sean Payton como entrenador en jefe.
Ese mismo año, los Saints jugaron inspirados y se quedaron en el Juego de Campeonato de la Conferencia Nacional contra Chicago Bears. Y 4 temporadas más tarde, Payton, Brees y Bush lideraron a su equipo a obtener su primer campeonato en la historia de la franquicia, cuando vencieron 31-17 a Indianapolis Colts, con todo y Peyton Manning, en el Super Bowl XLIV.
Lamentablemente, tiempo después, se dio a conocer el famoso “Bounty-gate”, que era un sistema interno de la defensiva que daba dinero al jugador que fuera responsable de sacar lesionado a uno de los otros equipos, principalmente eran head coaches.
Tras sanciones sin precedentes, incluyendo 1 año suspendido de la NFL al head coach Sean Payton.
En 2018, los Santos tuvieron otra gran temporada de la mano de Brees, a quien ya acompañan en esta nueva etapa, el receptor abierto Michael Thomas y el muy versátil corredor Alvin Kamara.
CONTINUARÁ …